Running. El Deporte de Moda

La actividad de correr en calle, comúnmente conocida por el anglicismo running, se ha convertido en la última década en un fenómeno mediático y social de moda a nivel mundial.

 

RUNNING, EL DEPORTE DE MODA


 

La actividad de correr en calle, comúnmente conocida por el anglicismo running, se ha convertido en la última década en un fenómeno mediático y social de moda a nivel mundial. Frente a otras disciplinas deportivas tradicionales como el fútbol o natación, el running presenta ventajas comparativas muy importantes que han dado lugar a que muchos panameños y residentes en nuestro país se hayan aficionado a practicarlo de manera regular y lo hayan convertido en un estilo de vida.

 

 

MÚLTIPLES BENEFICIOS

Correr es uno de los gestos más naturales que existen, se puede practicar a cualquier edad, y sirve como complemento de base a otras muchas disciplinas deportivas. El running se caracteriza por ser un deporte sencillo y de bajo costo, ya que un calzado y vestuario básico son suficientes para iniciarse. Su práctica es posible en una infinidad de calles y espacios abiertos, sin necesidad de instalaciones especializadas. A diferencia de otras modalidades, no se requiere de compañeros de equipo para poder practicarlo, y tampoco existe un reglamento con rígidas normas a las que atenerse. Todo ello favorece su éxito, y el que muchas personas puedan compaginar el horario de sus sesiones de entrenamiento con sus obligaciones familiares y laborales. Adicional a los beneficios que desde el punto de vista físico produce correr, en lo que se refiere al control de nuestro peso corporal y a tener una mejor salud, se une el beneficio psicológico, ya que este tipo de ejercicio mejora la autoestima y ayuda a aliviar las tensiones y el estrés que se generan en nuestra vida cotidiana.

CONSEJOS PARA DEBUTANTES

Si queremos comenzar a correr de manera regular, es recomendable someternos a una revisión médica general con el objeto de confirmar nuestro estado de salud y minimizar posibles patologías y lesiones a futuro. Aunque seamos caminantes consumados, al correr se aumentará nuestra respiración y frecuencia cardíaca, la mecánica de la zancada y el trabajo muscular será diferente, tendremos mayor sudoración y pérdida de líquidos, y realizaremos un mayor gasto de calorías. En cuanto a nuestra vestimenta son preferibles fibras y tejidos técnicos que ayuden a eliminar el sudor. Para evitar la aparición de rozaduras, el uso de vaselina en todas las zonas de fricción es un gran remedio. Es muy importante no usar prendas de plástico, las cuales no aumentarán el gasto de calorías y la pérdida de peso, sino solamente nos generarán sensación de agobio. No esperes a tener sed para hidratarte, y lleva una botella en la mano preferiblemente con agua fría. En cuanto al calzado, debe ser adecuado a nuestra talla, peso y forma de pisada. Lo recomendable es acudir a una tienda especializada para recibir asesoría. No compres en base a colores o modas, sino buscando comodidad y amortiguación.

 

¿CUÁNDO Y DÓNDE?

Debido a la alta temperatura y grado de humedad registrados en la mayoría del territorio nacional, las mejores horas para la práctica deportiva son las que corresponden con la salida del sol al amanecer, y su ocaso en la tarde-noche. Para correr de noche resulta muy útil una linterna o lámpara de cabeza. No solo es importante que veamos por donde corremos, sino ser vistos por conductores y otros usuarios de la vía. Prendas reflectivas ayudarán a esto último. Para ejercitarnos, los mejores lugares son aquellos con nulo o poco tráfico vehicular, planos, con suelo regular, rodeados de naturaleza y protegidos del sol. Hay que evitar en lo posible correr por aceras debido al peligro de tropezar con salientes y obstáculos. Los mejores y más concurridos sitios en la ciudad capital son actualmente la Cinta Costera en sus tres fases, el Parque Omar, el boulevard de Costa del Este, la Calzada de Amador y Ciudad del Saber.

ESCUCHA A TU CUERPO

Comenzando a correr opta por alternar periodos de caminata con tramos de trote. Tómalo con calma y “escucha” a tu cuerpo, que te va a hacer saber en que momento es necesario bajar el ritmo o parar. Lleva una respiración relajada, con la boca entreabierta, tomando aire por nariz y boca y exhalando solo por boca. Después de correr recuerda realizar unos estiramientos de los principales grupos musculares, sintiendo tensión moderada en cada uno de ellos por unos segundos.

Fernando RevueltaRunning. El Deporte de Moda

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